ENTREVISTA A LÉA TODOROV - DIRECTORA DE "MARIA MONTESSORI"

El pasado jueves 25 de abril se presentó en la Sección Oficial del Festival de cine de Barcelona-Saint Jordi la película María Montessori, una producción que nos adentra en la vida de la famosa doctora y educadora italiana que a principios del siglo XX apostó por una nueva forma de trabajar con los niños, sentando las bases de lo que se convertiría en uno de los modelos pedagógicos más reconocidos y mejor valorados a nivel mundial: el “método Montessori”.

Dirigida por la cineasta francesa Léa Todorov y protagonizada por Jasmine Trinca y Leïla Bekhti, la película nos sitúa en el año 1900 en el centro de enseñanza elemental que Maria Montessori codirige en la ciudad de Roma. La acompañamos en sus inicios trabajando con niños discapacitados, siguiendo las bases de su metodología basada en la observación y rodeada de los materiales manipulativos específicos creados por ella misma. Todo a través de la figura de una mujer fuerte, segura de si misma y del valor de su proyecto, que tuvo que elegir entre su vida personal y su carrera profesional para poder crear, desarrollar y difundir el método en el que creía, en una época en la que las decisiones importantes estaban en manos de los hombres.

Sinopsis: París, año 1900. Lili d´Alency es una popular cortesana que esconde un secreto. Su hija Tina nació con una discapacidad y la mantiene alejada para proteger su carrera y su reputación. Pero el día que se ve obligada a tener que cuidar de ella, Lili decide marcharse a Roma para comenzar una nueva vida. Allí conoce a María Montessori, una doctora que está desarrollando un revolucionario método educativo para trabajar con los llamados “niños deficientes” y que años después se convertirá en una de las pedagogías mejor valoradas en todo el mundo: el “Método Montessori”.

La película se estrena en nuestros cines este miércoles 1 de mayo. Con motivo de su pase en el reciente BCN Film Fest, y gracias a nuestr@s amig@s de KARMA FILMS, tuvimos la oportunidad de esntrevistar a Léa Todorov, la directora de la cinta. Éste es el resultado de la entrevista:

Carlos Penela.- ¿Cuándo y cómo decide hacer una película sobre María Montessori?

LÉA TODOROV.- Pues había participado en la redacción de un documental que se llama "Revolución escuela", y que habla de los pedagogos entre las dos guerras. María Montessori es una de las figuras sobre las que he hecho muchos estudios, cuando estudio hago mucha investigación. Había leído varias biografías sobre ella y me di cuenta de que su vida era apasionante, rica, y me imaginé que un día podría hacer una película sobre ella. Pero después pasaron los años y no fue hasta al nacer mi hija, que nació con un síndrome genético que hizo que sea una niña distinta a los demás, que volvió a mi el recuerdo de que María Montessori había trabajado, en primer lugar, con niños precisamente neuroatípicos o con una discapacidad motora. Y así, con el productor, nos lanzamos a la redacción del guión de esta película.

Carlos Penela.- ¿Cómo llega Jasmine Trinca al reparto?

LÉA TODOROV.- A Jasmine Trinca la encontré muy avanzada la película. Empezamos a vernos en Roma, una vez que fui allí y le expliqué un poco las ganas que tenía de hacerla, y que no quería hacer un biopic completo, sino que quería trabajar en un año de su vida, en ese momento tenía que hace una elección personal terrible entre su hijo y su vida profesional, su destino. El hecho de que la película escoja mostrar el momento en el que trabaja con los niños neuroatípicos es algo que ha interesó mucho a Jasmine, estaba muy contenta de poder experimentar otro tipo de filmación.

Carlos Penela.- ¿Cómo fue el proceso de investigación para la película?

LÉA TODOROV.- Para una película así, hay varios tipos de investigación y de preparación que hago. Primero hay una investigación universitaria, de conocer muy bien la vida de María Montessori, porque yo no escogí enseguida hablar de este período concreto. Hice una investigación extensa sobre toda su vida, leyendo mucho los libros, los artículos que había escrito, pero también artículos más íntimos que hemos publicado en los últimos años. Después, hay una investigación sobre el personaje de Lili, para entender un poco cuál es su papel, dedicado a la mujer alrededor del año 1900. El personaje en el que me inspiró son las Cocotte parisinas de 1900, la Belle Epoque, y como estas señoras ocupan un lugar muy sorprendente, porque siendo cortesanas, y en cierto modo prostituidas, tienen su poder: son las prescriptoras de cómo hay que estar en el mundo en cuanto al vestuario y las costumbres, también escriben libros, cartas, piensan en el lugar que ocupan y explican que algunas decían (esta es una frase que me ha marcado), que las mujeres en 1900 tienen que escoger entre putas, viejas o domésticas. Me pareció que era un poco lo que yo quería hacer en la película. Al final de la película María Montessori se convierte en la virgen, encuentra una virginidad en el sentido del niño, y coge así su destino, ahí es donde dice claramente que vive del lado de la puta. Pero después, para hacer la película, hay muchas otras investigaciones:  la imagen, cómo era la vida en Roma en el año 1900, etc. Por lo tanto, hay mucha investigación documental, fondo fotográfico y museos.

Carlos Penela.- ¿Qué es lo que más se sorprendió de todo lo que descubrió?

LÉA TODOROV.- Me sorprendió mucho un libro de Sibilla Aleramo, una escritora italiana del mismo periodo. En él explica cómo creció, tenía una educación, tenía acceso a la cultura, era considerada una persona normal, hasta que su padre se convirtió en director de una fábrica en el sur de Italia y, de repente, ella, por ser mujer, se convirtió en un ser inferior. La violó un trabajador de su padre, tuvo que casarse con él y tuvo un niño. Entonces decidió marcharse para escribir y para convertirse en Sibilla Aleramo, su seudónimo. Al hacer esto lo perdió todo, porque se consideraba que pertenecía a su marido, el violador, y a él le debía sus ingresos. Perdió incluso la custodia de su hijo. La desigualdad de derechos en la ley de aquella época entre hombres y mujeres era mucho más fuerte. Leer sobre esta escritora en el proceso de investigación para la película es lo que más me ha sorprendido, comprobar  hasta qué punto había un estado de apartheid respecto a las mujeres en esa época. Y creo que conviene recordarlo cotidianamente para poder entender el mundo en el que vivimos hoy en día.

Carlos Penela.- La educación siempre será la base para empezar a eliminar los problemas sociales e individuales.

LÉA TODOROV.- Por supuesto, la educación está en el centro, y por eso María Montessori invierte todo ahí. María, en el momento de su vida que reflejo en la película, es muy feminista en su discurso, pero esto es algo que al final deja de lado para dedicarse exclusivamente a la educación, porque tiene la sensación de que si cambiamos la educación todo va a cambiar. Sinceramente, a día de hoy creo que es una ilusión, y que en realidad si no trabajamos a la vez para cambiar la sociedad no habrá bastante con la educación.

Carlos Penela.- Yo espero que después de su película, que no es la primera que se hace sobre una mujer que había sido olvidada o no lo suficientemente reconocida, se sigan contando muchas más historias de mujeres que luchaban a contracorriente contra las condiciones sociales de la época. En parte pienso que se dice de forma errónea que eran mujeres adelantadas o tiempo. Yo creo que el foco hay que ponerlo en la sociedad. No es que estas mujeres fueran adelantadas a su tiempo, sino que la historia y la sociedad siempre ha estado por detrás de ellas.

LÉA TODOROV.- Para ella es algo así, porque ella cree y ve el mundo del futuro, siente que habrá una liberación, lo dice en la película. Es una cita de María Montessori, decir "antes había la esclavitud de la mujer y hay que liberarse también, liberar a los niños de esta esclavitud". Me parece que al final esta idea de la esclavitud está en el centro de nuestra sociedad, podemos pensar que hemos avanzado, pero en realidad no siempre vamos en la misma dirección. Siempre tenemos que reconsiderar esta esclavitud como algo que está en el centro del lugar que ocupan las mujeres y nuestros hijos en la sociedad. Estamos lejos de considerarlos como individuos a los que debemos respeto. Incluso hoy en día, en la educación y en las familias, las y los consideramos los esclavos del padre, y la prueba en Francia es que uno de cada diez es víctima, antes de los 15 años, de violencia sexual.

Carlos Penela.- ¿Qué aprendido y con qué se queda de haber hecho María Montessori?

LÉA TODOROV.- Me quedo con lo que he querido transmitir como lección en la película, y que es esencial, la potencia y la fuerza del amor. María Montessori mantiene en su discurso que para educar a los niños hay que invertir amor en ellos. No hay ninguna duda sobre estas palabras y sobre la fuerza infinita de este concepto, con eso es con lo que me quedo.